jueves, 26 de febrero de 2009

Un beso de despedida al bloqueo
Manuel E. Yepe
“Aunque el bloqueo a Cuba durante 50 años puede haber sido una política apropiada de respuesta a la revolución cubana en medio de la Guerra Fría, la realidad del Siglo XXI reclama su abolición”.
Con la firma del Coronel Glenn Alex Crowther, un artículo titulado “Kiss the Embargo Goodbye”, así lo afirma en el boletín oficial del Instituto de Estudios Estratégicos (ISS, por sus siglas en inglés) de la Universidad del Ejército de los EEUU (U.S. Army College) subordinada al Departamento de Defensa del Gobierno de los Estados Unidos.
“Es hora de darle el beso de despedida al embargo, aunque manteniendo firmemente la posición de que la democracia es la única forma de gobierno aceptable en el Hemisferio Occidental”, señala el artículo, reafirmando con ello un supuesto derecho de Estados Unidos a determinar la forma de gobierno que deben tener sus vecinos, que nadie le reconoce.
Según la interpretación de la historia de Cuba que hace el Coronel Crowther, luego de varias victorias de los insurgentes, el dictador Batista, aislado tanto del pueblo cubano como del gobierno de los EEUU a causa de sus políticas represivas, huyó al exilio el primero de enero de 1959 y Fidel Castro llegó a La Habana el 8 de enero de 1959 en medio de un gran vacío de gobierno.
Dice Crowther que, inicialmente, EEUU actuó de manera conciliatoria, pero la mutua antipatía impidió el encuentro. Entonces Washington respondió apoyando la invasión de Bahía de Cochinos en 1961 y Cuba permitió a la Unión Soviética emplazar misiles nucleares en la isla. Luego Fidel inició una política de exportación de la revolución al resto del Hemisferio Occidental y a algunos países de África y su lugarteniente Che Guevara prometió dos, tres, “cien” Vietnams.
Más tarde vendría, según Crowther, el triunfo de los sandinistas contra el dictador Somoza, única confirmación de la teoría cubana del foco guerrillero que, sin embargo, en Nicaragua fracasó gracias a que EEUU intervino hasta derrotar a los revolucionarios y lo siguió haciendo en toda América Latina contra todas las revoluciones de inspiración fidelista.
En este contexto, “no fue sorprendente que Estados Unidos se propusiera castigar al gobierno cubano y que, entre otras medidas, declarara el siete de febrero de 1962 el embargo comercial, económico y financiero. Su justificación inmediata era la expropiación de propiedades de corporaciones y ciudadanos estadounidenses; sin embargo, su fin realmente era desestabilizar a Cuba y provocar el cambio de su gobierno”.
Afirma el autor que fue gracias al apoyo que la Unión Soviética le brindó a Cuba que el bloqueo no pudo derrumbar a la revolución, pero sí logró hacerles mucho daño a los cubanos, impidiéndoles así brindar mayor apoyo a otras revoluciones en todo el mundo. Durante la Guerra Fría, la necesidad de ayudar a Cuba fue una de las tácticas utilizadas por Estados Unidos para desgastar a la URSS y uno de los motivos por los que la necesidad del embargo ha disminuido con el fin de la Guerra Fría.
Las únicas razones que justifican hoy mantener el bloqueo son, a juicio de Crowther: (1) forzar a Cuba a una reforma y (2) consentir a los reclamos de la comunidad cubana de Miami. Fueron ellas las que argumentaron en 1992 la Ley Torricelli (Cuban Democracy Act) y, en 1996, las Leyes Helms-Burton (Cuban Liberty and Democracy Solidarity Act) destinadas a reforzar el bloqueo.
La primera razón, la necesidad de mantener la presión para obligar a Cuba a reformarse, ha fracasado manifiestamente. “No solo ha fracasado el embargo sino que no está en línea con nuestra política de relaciones con otros regímenes comunistas que eran nuestros oponentes durante la Guerra Fría”, dice el artículo y menciona los ejemplos de China, Vietnam y Corea Popular.
La segunda razón, el reclamo de los cubanos de Miami de mantener el embargo, ha ido desapareciendo tan lentamente como la Guerra Fría, escribe Crowther y refiere cómo han ido variando en la diáspora cubana las posiciones sobre los vínculos con el país de origen.
Agrega, cual si fuera un gran descubrimiento, que el bloqueo concita la movilización del pueblo cubano contra la intromisión de EEUU en sus asuntos internos, aunque esto último lo justifica con las viejas mentiras que presentan las acciones cubanas de defensa como “actos tiránicos del régimen comunista”.
El levantamiento del bloqueo –advierte- presentaría a EEUU ante la comunidad internacional como magnánimo y abierto. “No hacerlo nos muestra ante el resto del mundo vengativos y mezquinos”.
El articulista, profesor investigador de asuntos de seguridad nacional en el Instituto de Estudios Estratégicos (SSI) del Ejercito de Estados Unidos, arguye que “no podemos convencer a nadie de que Cuba es una amenaza para EEUU, ni afirmar que más de lo mismo tendría un impacto positivo. En cambio, levantar el bloqueo indicaría que estamos buscando una nueva vía de lograr el cambio.”
Crowther supone así mismo que levantar el bloqueo es abrir el mercado a las mercancías y servicios norteamericanos, y sueña con una sociedad cubana aburguesada y consumista, ávida, cuando termine el bloqueo, de los efectos electrodomésticos y chucherías norteamericanas, “como en el Irak de 2003”.
Es indignante que haya quienes aboguen por levantar el bloqueo, no por el injustificable crimen cometido contra el pueblo cubano durante medio siglo, sino por su inutilidad para lograr los malsanos propósitos que lo generaron.

miércoles, 25 de febrero de 2009

Se multiplican en Washington los llamados a un cambio de política hacia la isla
Un influyente senador republicano reconoce que el bloqueo a Cuba ha sido "un fracaso"
David Brooks
La Jornada
Uno de los senadores republicanos de mayor influencia en asuntos exteriores se sumó hoy a un creciente coro de líderes republicanos y demócratas, altos oficiales militares, asociaciones empresariales, centros de análisis y hasta un creciente sector dentro de Miami, que califican de fracaso la política estadunidense hacia Cuba y proponen un giro en la relación bilateral ante esta coyuntura de transiciones políticas en Washington y La Habana.
Con la elección de Barack Obama y su intención declarada de modificar algunas de las medidas contra Cuba, todo esto alimenta la expectativa de que Estados Unidos está al borde de cambiar su política hacia Cuba, y tal vez de una manera sin precedente en 50 años.
Algunos creen que podría ser el principio del fin del embargo –instrumento central del arsenal estadunidense contra Cuba desde hace medio siglo–, otros estiman que podría acabar con sólo aflojar algunas de las medidas de esa política de asfixia, y también hay quienes alertan que podría ser otro intento de una política que busca el mismo objetivo de cambio de régimen, pero disfrazado de una mayor apertura y adornada con palabras como democracia y derechos humanos.
Hoy el senador Richard Lugar, republicano de mayor rango en el Comité de Relaciones Exteriores y considerado un estadista en política exterior, hizo circular un informe entre sus colegas que decía que “después de 47 años… el embargo unilateral sobre Cuba ha fracasado en lograr su propósito declarado de ‘llevar la democracia al pueblo cubano’...”.
Lugar escribe en la carta a sus colegas que acompaña el informe que el debate sobre la política hacia Cuba tiene implicaciones en las relaciones interamericanas y hasta globales de Estados Unidos, y subraya: a pesar de la incertidumbre sobre el futuro político de Cuba en el mediano plazo, está claro que los cambios recientes de liderazgo han creado una oportunidad para que Estados Unidos reevalué una relación compleja marcada por malentendidos, sospechas y hostilidad abierta.
Ampliar comercio y cooperación
En el informe preparado por los asesores de Lugar se propone considerar no sólo anular las prohibiciones a viajes y remesas, sino también la exploración de ampliar el comercio, la cooperación antinarcóticos y los intercambios entre ambos países y el desarrollo de la relación a través de diplomacia bilateral y multilateral a través de una secuencia de pasos. El informe está disponible en http://lugar.senate.gov/sfrc/pdf/Cuba.pdf
Es la primera vez que Lugar se involucra de manera tan directa en el debate sobre la política hacia Cuba y eso en sí es significativo, afirman analistas. Daniel Erikson, experto en la relación bilateral de Diálogo Interamericano comentó a La Jornada que ello ayudará a darle forma al debate sobre un cambio, y demuestra que existe un creciente consenso bipartidista (contra) el embargo.
En tanto, hace un par de semanas se presentó un proyecto de ley bipartidista en el Congreso para permitir la libertad de viajes sin restricciones de Estados Unidos a Cuba, impulsado por el congresista federal demócrata William Delahunt junto con media docena de colegas de ambos partidos.
Aunque este tipo de intentos de modificar las restricciones ha fallado en el pasado, algunos, como Erikson, consideran que tiene mayores posibilidades por el simple hecho de que en esta ocasión no enfrenta el veto automático de la Casa Blanca de George W. Bush, y a la vez se ha ampliado la mayoría demócrata en el Congreso.
Los llamados por un cambio en la relación con Cuba se han multiplicado en diversas esquinas de la cúpula política, intelectual y económica del país, expresados en declaraciones e informes con conclusiones generales similares a las de Lugar de especialistas en los centros de investigación sobre política exterior más prestigiosos como el Brookings Institution y el Council on Foreign Relations y Diálogo Interamericano, entre otros.
Figuras como el coronel Lawrence Wilkerson, ahora del New America Foundation, pero antes mano derecha del general Colin Powell, recomiendan que se requiere de una nueva política hacia la isla, lo cual también es requisito para un cambio positivo en las relaciones de Washington con el hemisferio. Para el resto del mundo, nuestra política fracasada, obsoleta de 50 años hacia Cuba, va en contra de todo lo que Obama presentó en su campaña... todo el mundo cree que nuestra política está equivocada. Y el mundo tiene razón, concluyó Wilkerson en un artículo el mes pasado publicado por la cadena McLatchy Newspapers.
Hace unos días, el coronel Glenn Crowther, profesor e investigador del Instituto de Estudios Estratégicos del Colegio del Ejército de Estados Unidos, escribió en un artículo: Es hora de darle su beso de despedida al embargo, mientras mantenemos una posición sin ceder de que la democracia es la única forma de gobierno aceptable en el Hemisferio Occidental. El coronel Crowther afirma que el embargo es un fracaso y que Cuba no representa ninguna amenaza para Estados Unidos.
Varios expertos coinciden que en gran medida esta coyuntura es la más prometedora para lograrlo en décadas. Señalan entre otras cosas que el sector más anticastrista y conservador cubanoestadunidense ya no es el único interlocutor político de esa comunidad, que la elección de Obama no dependió del apoyo de ese sector en Florida y por lo tanto no les debe –como tantos de sus antecesores– ningún favor político, que una amplia gama de políticos de ambos partidos, empresarios, académicos, diplomáticos y asociaciones de todo tipo favorece un cambio profundo en la relación bilateral por medio del diálogo, y que hay una transición política dentro de Cuba.
Durante su campaña, Obama dijo tener la intención de suspender las estrictas limitaciones a viajes y envío de remesas por cubanoestadunidenses. Sin embargo, también afirmó que tenía la intención de mantener el embargo. Su ahora secretaria de Estado Hillary Clinton reiteró estos puntos en su comparecencia ante el Congreso para ser ratificada en enero, y dijo que Obama cree que los cubanoestadunidenses son los mejores embajadores de la democracia, la libertad y una economía de libre mercado.
Obama ha dicho que está dispuesto a establecer pláticas con el gobierno de Raúl Castro, pero ha dejado en la ambigüedad lo que se requiere para ello, y cunde la especulación sobre cuáles son las señales que Washington desea enviar o cuáles espera desde La Habana.
Algunos expertos consideran que aunque la crisis económica y otras emergencias obviamente han sido el centro de atención para este joven gobierno, y que aún no hay nombramientos a puestos claves encargados de política hacia América Latina, que Obama podría anunciar la suspensión de las restricciones sobre viajes de familiares y envío de remesas antes de celebrarse la Cumbre de las Américas programada para abril.

sábado, 21 de febrero de 2009

Cincuenta años de Revolución Cubana
Estados Unidos y Cuba, ¿hacia la normalización?

Salim Lamrani
Le Monde Diplomatique

Cuba celebra el quincuagésimo aniversario del triunfo revolucionario de Fidel Castro sobre la dictadura de Fulgencio Batista en 1959. Por su parte, el nuevo presidente electo estadounidense, Barack Obama, tomará posesión el 20 de enero, suscitando una extraordinaria expectativa en todo el mundo. Los cubanos esperan poder entablar, por fin, un diálogo conciliatorio con el nuevo líder occidental y arreglar sus diferencias. Balance de las relaciones cubano-estadounidenses bajo el reinado de George W. Bush y análisis de las perspectivas futuras.

La elección de Barack Obama a la presidencia de Estados Unidos es una revolución sin precedentes. Por primera vez en la historia del país, un hombre de color alcanza el puesto supremo. Al escoger al candidato demócrata, el pueblo estadounidense ha llevado al poder a un hombre que pretende encarnar una nueva política después de la desastrosa administración Bush.1

La llegada de Obama al poder es de buen augurio para las futuras relaciones entre La Habana y Washington. Como un símbolo, el ex senador de Illinois es el primer candidato presidencial demócrata que ganó el voto hispano del Estado de Florida, donde residen cerca de 800.000 cubanos, por un amplio margen de un 57%.2

Los cubanos de la isla acogieron el nombramiento de Obama con una mezcla de prudencia y satisfacción. «Sin duda es más inteligente, culto y ecuánime que su adversario republicano», declaró Fidel Castro con respecto a él. Se trata del «mejor orador político de Estados Unidos de las últimas décadas», añadió, alabando sus «ideas bien articuladas».3

La administración Bush exacerbó las tensiones con La Habana hasta un nivel inédito desde la época de Reagan y aumentó singularmente las sanciones económicas. Desde su llegada al poder, el antiguo gobernador de Texas declaró su voluntad de derrocar al gobierno cubano. Así, resulta poco sorprendente que Cuba haya emitido una preferencia por Obama en detrimento de John McCain, considerado el heredero de George W. Bush.

Balance de George W. Bush

Desde su entronización en 2002, la administración Bush se mostró agresiva hacia La Habana. En abril de 2002, John Bolton, entonces subsecretario de Estado para el Control de Armamentos y la Seguridad Internacional, acusó Cuba de fabricar armas biológicas y exportarlas a terceros países, amenazando a la isla con represalias. En mayo de 2002, durante una visita histórica a Cuba, el ex presidente estadounidense James Carter desmintió las acusaciones de Bolton, lo que obligó a Washington a dar marcha atrás.4

En septiembre de 2002, James Cason fue nombrado jefe de la Sección de Intereses Norteamericanos de La Habana (SINA). A su llegada a Cuba el 10 de septiembre, declaró su intención de «acelerar el proceso de transición hacia una Cuba democrática». Una semana después, reunió a las principales figuras de la oposición cubana en su residencia y puso a su disposición una ayuda material y financiera para llevar a cabo sus actividades contra el gobierno. En marzo de 2003, 75 opositores que aceptaron los emolumentos que les brindó Washington fueron arrestados y condenados a severas penas de prisión por asociación con una potencia extranjera.5

Cason también intentó fomentar una crisis migratoria al negarse a otorgar visas a los candidatos a la emigración y violando así los acuerdos migratorios de 1994. Éstos estipulaban que Estados Unidos otorgaría como mínimo 20.000 visas al año a Cuba. Así, entre el 1 de septiembre de 2002 y el 28 de febrero de 2003, la SINA sólo proporcionó 505 visas, es decir, un 2,5% del total establecido por la convención. A título de comparación, en 2002, Washington había otorgado para el mismo periodo 7.237 visas, 8.300 en 2001, 10.860 en 2000 y 11.600 en 1999.6

Al mismo tiempo, con el objetivo de desestabilizar el país, la administración Bush estimuló la emigración ilegal por medio de Radio y TV Martí, recordando la existencia de la ley de Ajuste Cubano. Ésta permite a cualquier cubano que emigra legal o ilegalmente a Estados Unidos conseguir automáticamente al cabo de un año el estatuto de residente permanente y diversas ventajas más.7

La empresa fue exitosa. Efectivamente, entre agosto de 2002 y abril de 2003, ocurrieron siete secuestros, entre ellos uno mortal, en Cuba. Los individuos en cuestión pudieron alcanzar Estados Unidos donde fueron liberados bajo fianza, incluido el responsable del asesinato de un marino, lanzando así un mensaje claro a todos los que deseaban emigrar. Al mismo tiempo, Roger Noriega, entonces subsecretario de Estado para los Asuntos Interamericanos, declaró que todo flujo masivo de emigrantes sería «considerado como una amenaza para la seguridad de Estados Unidos y exigiría eventualmente una respuesta de orden militar». Frente a esas amenazas explícitas, La Habana tuvo que reaccionar drásticamente juzgando y ejecutando a tres secuestradores en abril de 2003, poniendo así término a la crisis.8

En mayo de 2004, Bush impuso nuevas sanciones que estableció la Comisión de Asistencia a una Cuba Libre. Dichas sanciones limitan a 14 días cada tres años las estancias en su país de origen de los cubanos residentes en Estados Unidos, separando así a numerosas familias, y reducen las remesas que se pueden enviar a sólo 100 dólares mensuales. La Comisión multiplicó los fondos destinados a la oposición, las transmisiones de programas subversivos y lanzó una campaña internacional de desprestigio contra el gobierno de La Habana. La Casa Blanca designó también a Caleb McCarry como procónsul encargado de la transición en una Cuba posrevolucionaria.9

Del mismo modo, mofándose de la legislación internacional, la administración Bush no vaciló en aplicar las sanciones económicas contra Cuba de manera extraterritorial. Varias delegaciones cubanas fueron expulsadas de diferentes hoteles donde estaban alojadas en México, Noruega y Reino Unido, con el pretexto de que dichos hoteles pertenecían a multinacionales estadounidenses. Washington también multiplicó las provocaciones contra el gobierno cubano mediante la SINA y canceló la mayoría de los intercambios deportivos, culturales y académicos entre las dos naciones.10

En julio de 2006, Bush elaboró otras sanciones y fijó en 18 meses el plazo para librarse del gobierno de Fidel Castro. Para ello dedicó un presupuesto de 80 millones de dólares que incluía un incremento de la financiación de la disidencia, la multiplicación de las transmisiones subversivas contra Cuba, un cabildeo sustancial hacia las demás naciones para reforzar el estado de sitio y sanciones contra los países que comerciasen con la Isla del Caribe.11

El 24 de octubre de 2007, el inquilino de la Casa Blanca pronunció un discurso virulento en la sede del Departamento de Estado, en Washington, contra Cuba. Bush anunció la creación de un «Fondo de la libertad para Cuba» de varios miles de millones de dólares, destinado a derrocar al gobierno de La Habana y a llevar de nuevo a Cuba a la esfera de influencia de Estados Unidos. Bush lo dijo claro: «la palabra básica en nuestras futuras relaciones con Cuba no es ‘estabilidad’ [sino] ‘libertad’».12

Un informe de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos (United States Government Accountability Office – GAO) del 19 de diciembre de 2007, que publicó 96 páginas sobre las consecuencias originadas por el endurecimiento de las sanciones económicas contra Cuba, es ilustrativo del ensañamiento de la administración Bush con La Habana. Según el GAO, el enfoque de los servicios aduaneros con respecto a Cuba «reduce la aptitud de los servicios aduaneros para llevar a cabo su misión, que consiste en impedir que los terroristas, criminales y otros extranjeros indeseables entren en el país».13

Las medidas que tomó la administración Bush fueron un fracaso. Las sanciones económicas suscitan un rechazo unánime. El mundo de los negocios, la opinión pública estadounidense y la comunidad internacional se oponen a ellas. El 29 de octubre de 2008, por decimoséptimo año consecutivo, 185 de los 192 miembros que componen la Asamblea General de las Naciones Unidas se pronunciaron por el levantamiento de este castigo que azota a los cubanos. Jamás se había alcanzado esa aplastante mayoría. Sólo Estados Unidos, Israel y Palau votaron contra la resolución. Desde su imposición en 1960, las sanciones han costado la bagatela de 93.000 millones de dólares a la economía cubana y 3.700 millones sólo en el año 2007.14

La posición de Barack Obama

El nuevo presidente estadounidense ha declarado su disposición a entablar conversaciones bilaterales con el gobierno de La Habana, «normalizar las relaciones y suavizar el embargo que ha presidido las relaciones entre nuestros países durante los cinco últimos decenios». Obama es el primer presidente estadounidense que anuncia un eventual levantamiento del estado de sitio económico contra Cuba. 15

Conforme a su promesa de campaña, Obama levantará rápidamente las restricciones a los viajes y al envío de remesas impuestas en 2004. «Se trata a la vez de una cuestión estratégica y humanitaria. Esta decisión [...] ha tenido un impacto profundamente negativo sobre el bienestar del pueblo cubano», declaró Obama. Como presidente, «otorgaré a los cubano-estadounidenses derechos ilimitados para visitar a sus familias y mandar dinero a la isla», aseguró.16

Por su parte el Congreso, dominado por los demócratas, podría poner fin a la prohibición de viajar a Cuba a los ciudadanos estadounidenses y Cuba volvería a ser un destino turístico para Estados Unidos. Por otra parte, facilitaría también los trámites administrativos para permitir que La Habana adquiriera más fácilmente productos agrícolas estadounidenses y eliminaría las restricciones impuestas a los intercambios académicos, culturales y deportivos.

Un modus vivendi entre Cuba y Estados Unidos es concebible. Desde 1959, La Habana ha tendido varias veces un ramo de olivo a Washington y cada vez ha recibido un rechazo obstinado. El gobierno de Raúl Castro, quien había propuesto dos veces un diálogo a Bush desde 2006, declaró que estaba dispuesto a resolver todos las diferencias con la nueva administración demócrata, sobre una base de respeto de la soberanía, de reciprocidad y de no injerencia.17

El presidente Obama tiene una oportunidad histórica para poner fin a una política obsoleta e inhumana contra el pueblo cubano. Si da prueba del coraje político necesario, si logra escapar a la probabilidad, cada vez más fuerte, de un atentado contra su vida, entonces será posible considerar una solución honorable para las dos naciones después de cincuenta años de relaciones conflictivas.

Notes

1 The New York Times, «The Next President», 4 de noviembre de 2008.
2 Casey Wood, «Obama First Democrat to Win Florida’s Hispanic Vote», The Miami Herald, 5 de noviembre de 2008.

3 Fidel Castro Ruz, «Las elecciones del 4 de noviembre», Cuba Debate, 3 de noviembre de 2008.

4 The Miami Herald, «No Proof of Bioweapons in Cuba, Carter Says», 14 de mayo de 2002.

5 Cuba Socialista, «The Diplomacy of James Cason», septiembre de 2003.
6 Salim Lamrani, Fidel Castro, Cuba y los Estados Unidos (La Habana: Editorial José Martí, 2008), p. 189.

7 Ibid.

8 Ibid.

9 Colin L. Powell, Commission for Assistance to a Free Cuba, (Washington: United States Department of State, mai 2004). www.state.gov/documents/organization/32334.pdf (sitio consultado el 7 de mayo de 2004).

10 Salim Lamrani, «Washington dicta la ley sobre Cuba en Europa», Rebelión, 16 de enero de 2007.

11 Condolezza Rice & Carlos Gutierrez, Commission for Assistance to a Free Cuba, (Washington: United States Department of State, Julio de 2006). www.cafc.gov/documents/organization/68166.pdf (sitio consultado el 12 de julio de 2006).

12 George W. Bush, «Remarks by the President on Cuba Policy», Office of the Press Secretary, The Miami Herald, 24 de octubre de 2007.

13 The United States Government Accountability Office, Economic Sanctions. Agencies Face Competing Priorities in enforcing the U.S. Embargo on Cuba, Report to Congressional Requesters, noviembre de 2007.
http://www.gao.gov/new.items/d0880.pdf (sitio consultado el 21 de diciembre de 2007), introducción, pp. 1, 6, 7, 48.

14 Edith M. Lederer, «UN Again Urges US to Lift Embargo Against Cuba», The Associated Press, 29 de octubre de 2008.

15 Barack Obama, «Our Main Goal: Freedom in Cuba», The Miami Herald, 21 de agosto de 2007.

16 Ibid.

17 El Nuevo Herald, «Triunfo de Obama pone a Raúl ‘contra la pared’, afirma opositor», 6 de noviembre de 2008.

martes, 17 de febrero de 2009

World Personalities Demand Freedom for the Cuban Five in letter to Barack Obama

More than 500 well known intellectuals and world figures have signed so far a letter to US President Barack Obama to demand immediate freedom for five Cuban antiterrorists unfairly jailed in the United States. The letter was written by intellectuals, members of the Peruvian Chapter of the World Wide Web in Defense of Humanity, and has been signed on the Internet by Nobel Prize winner Wole Soyinka, Noam Chomsky, prestigious US intellectual, and Frei Beto, Brazilian theologian.Brazilian Senator Fatima Cleide, Brazilian Lawyer Order's President Cesar Brito, famous Puerto Rican artist Danny Rivera, and famous French dramatist Jean Marie Binoche, and others have also signed the letter. The letter confirms that the five Cubans in prison for 10 years in that nation are innocent people that were trying to gather information to stop and avoid terrorist actions against their homeland, also preserving the lives of US citizens.Rene Gonzalez, Gerardo Hernandez, Ramon Labanino, Antonio Guerrero and Fernando Gonzalez are victims of a harsh sentence that includes up to two lives in prison, for crimes they have not committed, the text says."Mr. President, the signatories of the present letter are renewing our request, aware of the current international situation, aggravated by serious economic and social crises, to put an end to the unjustified blockade against Cuba and order immediate freedom for the five Cuban patriots," the document says.
Abogados estadounidenses exigen libertad para los Cinco
FIDEL RENDÓN
Representantes del Gremio de Abogados de los Estados Unidos expresaron hoy, en La Habana, su solidaridad con los cinco héroes cubanos presos desde hace una década en cárceles norteamericanas por evitar acciones terroristas contra la Isla.
Dean Hubbard, miembro de la mencionada organización, se pronunció por la inmediata e incondicional liberación de esos luchadores antiterroristas, al intervenir en el III Encuentro Internacional de los Abogados Laboralistas inaugurado este lunes en el Hotel Nacional de Cuba.
Ante más de 160 delegados, en nombre de su asociación Hubbard expresó que no dejarán de luchar hasta lograr la total liberación de Los Cinco y el regreso a su Patria.
El abogado norteamericano igualmente rechazó el criminal bloqueo económico, comercial y financiero mantenido por Estados Unidos contra la Isla desde hace casi cinco décadas.
La jornada inaugural la presidieron Joaquín Bernal, vicejefe del Departamento de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Tito Palma Caicedo, viceministro de Trabajo y Empleo de Ecuador, y otros dirigentes de organizaciones de abogados y juristas cubanos.
Abogados laboralistas de varias naciones debatirán hasta mañana los efectos de la crisis económica frente al sector del trabajo y la representación sindical, y la protección de los derechos laborales y sociales de los trabajadores frente a los embates de la crisis económica mundial.
El encuentro acoge a juristas y representantes sindicales de las naciones mencionadas y de Argentina, Colombia España, Inglaterra, México, Brasil y Costa Rica.
Lo auspician la Asociación Americana de Juristas y la Asociación Latinoamericana de Abogados Laboralistas, junto a la Unión Nacional de Juristas de Cuba y la Secretaría América de la Federación Sindical Mundial. (AIN)

viernes, 13 de febrero de 2009

ENCUENTRO CON LA PRESIDENTA DE CHILE MICHELLE BACHELET

Reflexiones del compañero Fidel:
ENCUENTRO CON LA PRESIDENTA DE CHILE MICHELLE BACHELET
2009-02-12
No importa lo que yo diga sobre el amistoso encuentro, algunas agencias y publicaciones tomarán la información y divulgarán que el anciano, el convaleciente de una grave enfermedad o algún otro calificativo dirigido a reducir el modesto valor de lo que expresé a mi prestigiosa interlocutora.
A Michelle le correspondió el mérito de ser electa como Presidenta de Chile por el voto mayoritario otorgado al Partido Socialista que la postuló. Por primera vez en los últimos años en América Latina una organización de izquierda había obtenido tal victoria, sin apoyo del dinero, las armas y el aparato de publicidad yanki.
Aún más esa distinción correspondió al Partido Socialista de Salvador Allende, que murió bajo el artero ataque aéreo directo a La Moneda, donde ejercía ese cargo como Presidente Constitucional de Chile. No pidió ni concedió tregua. Estaba resuelto a morir en su puesto, como había prometido.
La traición del siniestro Jefe del Ejército Chileno, que fingió a todos y a todos engañó hasta el último momento no tuvo precedentes.
Hasta la casa en que moraba su familia, en Tomás Moro, también fue atacada y destruida.
En momentos muy duros de aquella etapa, cuando detrás quedaban miles de torturados, asesinados y desaparecidos, una mujer muy joven, Gladys Marín, dirigía al Partido Comunista de Chile, forjado durante decenas de años de esfuerzos y sacrificios de la clase obrera chilena, que la llevó a esa responsabilidad.
Gladys Marín y su Partido no se equivocaron, dieron todo su apoyo a Michelle Bachelet, determinando así el fin de la influencia de Augusto Pinochet. No se podía admitir que el tirano diseñado y llevado al poder por el imperio rigiera una vez más los destinos de Chile.
La opinión mundial aborrecía su comportamiento.
A pesar de ello, no ha sido ni es aún fácil deshacer la urdimbre legal que, con la ayuda yanki, la oligarquía vengativa y fascista ata a la nación chilena, digna de un mejor destino.
Esa misma oligarquía hace más de cien años le arrebató a Bolivia, en la guerra desatada en 1879, la costa marítima que le daba amplio acceso al Océano Pacífico.
Bolivia sufrió una extraordinaria humillación histórica en aquella contienda. No solo le arrebataron la costa marítima y la salida al mar, sino que privaron a ese país, de origen auténticamente americano, sobre todo aimaras y quechuas, de extensos territorios muy ricos en cobre que constituían la mayor reserva del mundo, que habiendo sido explotada durante 130 años, hoy su producción se eleva a 5 millones 364 mil toneladas anuales y aporta a la economía chilena alrededor de 18 mil 452 millones de dólares anuales. No se concibe la sociedad moderna sin el cobre metálico, cuyos precios tienden a elevarse.
Otros valiosísimos minerales y productos naturales, algunos ya agotados y otros nuevos de altísimos precios, han aparecido. No se sabe cuáles de ellos eran chilenos y cuáles bolivianos.
Evo Morales, actual presidente de Bolivia, no por ello guarda rencor alguno, sino al contrario ofreció su territorio para una amplia y moderna vía, por donde podrán enviarse a muchos mercados del mundo los productos de la eficiente industria de Chile, en pleno auge y desarrollo, con sus laboriosos y productivos trabajadores.
Chile es especialmente eficiente también en la producción de nutritivos alimentos y maderas de alta calidad, en sus tierras agrícolas, sus montañas y su privilegiado clima.
No hay otro país que lo supere en la eficiencia de sus cultivos marítimos y de productos tan demandados como el salmón y otras especies cultivadas o naturales, en sus ricas aguas marítimas y terrestres.
Estamos hoy muy próximos al 15 de febrero, día del referéndum sobre la enmienda constitucional, en la hermana República Bolivariana de Venezuela.
José Martí fue el más profundo pensador revolucionario que ha tenido Cuba y nuestro Héroe Nacional. Frente a la imagen de granito de ese pensador, Michelle Bachelet depositó una ofrenda floral en nombre de su pueblo, que mucho agradecemos.
De Bolívar, dijo hace 115 años: "Lo que él no dejó hecho, sin hacer está hoy; porque Bolívar tiene que hacer en América todavía".
"Bolívar despierta cada cien años", sentenció por otro lado el gran poeta chileno Pablo Neruda.
A punto de cumplirse el segundo siglo de su rebelión contra la metrópoli española, Bolívar despierta de nuevo en la acción revolucionaria de Chávez. Si el nuevo líder, que conduce a su combativo pueblo no lograra el objetivo, es difícil que algún otro líder pudiera alcanzarlo. Los recursos mediáticos de la oligarquía y el imperio no podrían ser superados.
¿Qué hacer entonces para que este planeta dejara de ser como el infierno de Dante, donde un letrero a su entrada exigía dejar toda esperanza?
Albergo sin embargo la seguridad de que en Venezuela la Revolución obtendrá la victoria, y en Chile vencerá definitivamente el ideal del socialismo, por el cual luchó y dio su vida Salvador Allende.
De estos temas conversé con Michelle Bachelet, quien me hizo el honor de escucharme con interés, conversar cálidamente y expresar con amplitud sus ideas.
Estaré siempre satisfecho de su amistosa visita.

Fidel Castro Ruz
Febrero 12 de 2009
5 y 12 p.m.

martes, 10 de febrero de 2009

Work and Other Matters
It is not uncommon to make the same mistake twice; however, according to an ancient philosopher, we are the only animals who do this.
By: Luis Sexto

It is not uncommon to make the same mistake twice; however, according to an ancient philosopher, we are the only animals who do this. Once, about three years ago, I wrote about this human characteristic. I asked myself what could be the reasons for such a peculiar behaviour, and came up with the answer that maybe it is simply because we want to or because we want to forget the lessons of history.
That is to say, and now I am quoting from a famous saying, that we lack a common sense that is the less common of all senses. If there are terms in human tongues linked to the word “love,” such as reason, intelligence, maturity, prudence, sense, we also use others like hate, fanatism, stubbornness, lack of memory, stiffness. This explains why the human being tends to be ambivalent, and where there is virtue sometimes there will be vice and where there is correctness, there is at times error.
Doubt is rational and goes beyond our limitations. It brings distrust of our possibilities, and raises continued questions about our actions. We not only make the same mistakes twice but also give them the same solutions, even when these have been ineffective.
Do we lack the ability of reflection? Yes, we do. We lack being frank with ourselves. Instead of making personal desires, ideas and interests prevail; we have to focus on what is useful, important, urgent. If we persist in an indulgent vision, always trying to correct other people’s actions, we are at stake of losing the capacity of correcting our own.
I want to give an example. At the last Parliament session, Raúl Castro suggested an idea that encompasses what I have already said and I quote only the most important part, “We need to create in Cubans the need to work to avoid the problems affecting our work: indiscipline, unproductiveness, carelessness.” It seems to be true: Human subjectivity tends to modify behavior and reality. However, we also know there are scales in human groups like in military groups: a vanguard, center and rearguard. To believe that the vanguard can become a massive section and that the other parts of society become a minority would be equivalent to an almost irrational idealism. In my humble opinion, the wisest policy is one that perceives humans as beings who tend to be heroic and selfish at the same time and one that attempts to set order and progress based on this principle.
As such, would we be able to eliminate people’s idleness by force? During the 1960s, when Cubans were eager to stimulate national development, the government adopted a law to fight idleness. I don´t think that this problem can be solved with such a measure. On the contrary, it brought about other problems. Looking at the current times and analyzing the results of such a measure, could be reuse these solutions? I don´t think so. Firstly, because the times and problems are different: new problems need new solutions.
I don´t consider myself as infallible, not able to make a mistake. I also make mistakes, I used to look at my surrounding world, reflect, and consult with the future and past. For this reason I ask you to allow me to do my work as a commentator: to ask, to doubt. Are we going to continue seeing these people as the bad guys of the story? Are we going to continue turning a blind eye to important factors such as the influence of necessity in people’s behavior? If someone makes their livelihood on the black market instead of working, how to we encourage them to work creatively? I back this: the existence of an accessible market where the buyer’s will and money prevail. This would counteract a great number of these scourges such as “street vendors,” and the cons due to corruption and idleness. A revaluation of peoples’ salary also seems necessary as currently peoples salaries really mean nothing in trying to face the difficult current situation.
Obviously, I don´t exclude the responsibility of the individual. However, I consider that looking for an explanation to this problem by analyzing two opposite conditions, idleness and non idleness, is somewhat vague and does not offer much of a solution. Law and ideology are not enough to solve a situation where unsatisfied needs exert their utmost pression over people’s attitudes. It is also necessary, and this can be inferred from Raúl´s words, no review influences and a cash incentive, not only in terms of management. It is also essential to pay attention to political decisions so as not to make the same mistakes.

sábado, 7 de febrero de 2009

El fenómeno Cuba en Ginebra
Fausto Triana - Prensa Latina
Una lógica empírica serviría para preguntarse las razones que convierten a Cuba en un protagonista de lujo en el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de Naciones Unidas, con un respaldo significativo a sus postulados.Para llegar a las respuestas se requieren de varios análisis, pero la extensión es un pecado capital en un concierto mediático que no siempre tendría la frialdad de resaltar, como debiera, el éxito del Examen Periódico Universal (EPU) de la Isla.
Son 16 las delegaciones que pasarán el EPU del CDH en Ginebra hasta el 13 de febrero, pero ninguna –y esta es una verdad absoluta-, despertó tantas expectativas y entusiasmo como el informe cubano.
Se inscribieron más de un centenar de naciones para emitir sus criterios, la sala XVII del Palais de Nations se mantuvo repleta y por primera vez las autoridades de la o­nU marcaron el territorio para el palco de prensa.
Algunos elementos aislados soñaban con volver a las prácticas de la desacreditada Comisión de Derechos Humanos, suplantada por el actual Consejo, y se vieron amargamente sorprendidos al constatar que los tiempos cambian.
A falta de tiempo, solo pudieron usar de la palabra 60 países, 51 de los cuales encomiaron los logros de Cuba en educación, salud, emancipación de la mujer, proyectos sociales y culturales, y sobre todo, su vocación altruista de solidaridad internacional.
La mención al bloqueo de Estados Unidos fue casi una constante en los oradores, aceptado como asunto vital que ha perturbado el desarrollo de la Mayor de las Antillas.
Una frase de la ministra cubana de Justicia, María Esther Reus, quedó grabada en el escenario:
"Aceptamos todo tipo de diálogo con la tónica del debido respeto y la transparencia, pero rechazamos que se use el tema de los derechos humanos con fines injerencistas para atentar contra nuestra independencia y soberanía". En una pantalla gigante podían verse a las comitivas registradas para expresar sus opiniones. No era complicado anticipar cuáles iban a repetir la misma fraseología del pasado, todos pertenecientes a los países desarrollados.
Tampoco ninguno de ellos pudo prever que Sri Lanka terminara su emotiva intervención con un Hasta la Victoria Siempre que rompió el sopor diplomático con una sonada ovación.
De todas formas, los grandes monopolios de la información se encargarían de silenciar hechos tan evidentes para dedicarse, como es habitual, a hurgar en los supuestos lunares. Tal vez sería interesante que los medios occidentales pasaran alguna vez su EPU.
Cuba logra amplio respaldo en el Consejo de Derechos Humanos
La mayoría de los países que emitieron criterios sobre el informe presentado por la Isla ante el Consejo de Derechos Humanos se manifestó de forma constructiva y con signos de admiración
Reconocimientos a sus éxitos en educación, salud, solidaridad internacional y defensa de su soberanía, descollaron hoy en las intervenciones de diversos países sobre el informe de Cuba ante el Consejo de Derechos Humanos (CDH).
Se trató del ejercicio de Examen Periódico Universal (EPU) en el grupo de trabajo de este órgano de la o­nU, que ya examinó desde su instauración a 54 naciones.
La introducción del texto estuvo a cargo de la ministra cubana de Justicia, Maria Esther Reus, quien explicó que para su elaboración se hizo un amplio proceso de consultas con la sociedad civil y más de 200 Organizaciones No Gubernamentales (ONG).
Subrayó que su país concede gran importancia al EPU y la principal cualidad del sistema político cubano es su capacidad para el constante perfeccionamiento en función de las necesidades planteadas.
«Es un proyecto genuinamente autóctono, fundado en una rica historia de lucha por la igualdad y la solidaridad entre los hombres y las mujeres, la independencia, la soberanía, la no discriminación y la justicia social», puntualizó.
La titular terminó su exposición remarcando el apego de la Isla a los principios de objetividad, imparcialidad y no selectividad que deben caracterizar la cooperación internacional en materia de derechos humanos, siempre abierta al diálogo.
Luego se dio paso a los delegados. Se inscribieron más de un centenar de países para emitir sus criterios, pero por razones de tiempo sólo 60 pudieron hacerlo, 51 de los cuales se manifestaron de forma constructiva y la mayoría con signos de admiración.
Nota de color que rompió con el estilo de diplomacia acartonada del EPU fue la intervención del embajador de Sri Lanka, quien no escatimó en palabras de reconocimiento a Cuba, a la que calificó de país de vanguardia en la colaboración con el Tercer Mundo.
Mencionó los avances de la mujer, el apoyo de la Isla a la causa contra el apartheid, las misiones médicas y de alfabetización, la asistencia para enfrentar las consecuencias del tsunami en Sri Lanka y el terremoto en Pakistán, entre otras.
Terminó con un Hasta la Victoria Siempre, que arrancó una cerrada ovación en el Palais de Nations de Ginebra.
Frases como «impresionantes resultados», «mejor muestra de expresión popular de la democracia», «profundo compromiso con la solidaridad internacional pese al bloqueo de Estados Unidos» y «Revolución que dignifica a su pueblo», se escucharon en la sala.
Razón por la cual el viceministro primero de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, se congratuló del contraste alentador y respetuoso que dominaba el ambiente, a diferencia de las antiguas prácticas manipuladores y de doble rasero.
Las tres horas de deliberaciones llegaban a su fin después de que entre otros, oradores de Suráfrica, Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Filipinas, Ecuador, México, Jordania, Pakistán, Argelia, China, Rusia, Trinidad-Tobago y Jamaica consumieran sus turnos.
Para completar aspectos de la información, otros integrantes de la delegación cubana abundaron sobre el sistema judicial, parlamentario, trabajo y seguridad social, e informática y comunicaciones.


Del saber, la crítica y el diseño
Por: Alfredo Guevara
http://www.juventudrebelde.cu/opinion/2009-02-04/del-saber-la-critica-y-el-diseno/,


Building a New Policy for Latin America
Killing the Monroe Doctrine
By SAUL LANDAU and PHILIP BRENNER
President Barack Obama could swiftly improve U.S. relations with Latin America by announcing the death of the Monroe Doctrine and then presiding over its funeral. Such a statement would cost him little domestically, and win him praise and appreciation throughout Latin America and much of the world.
Most Americans don't know the details of this 185-year-old policy and could care less about it. Latin Americans, in contrast, not only can describe the Monroe Doctrine, but they revile it. In effect, it has become nothing more than hollow rhetoric that offends the very people it purports to defend.
In 1823, Secretary of State John Quincy Adams wrote, and President James Monroe proclaimed, a doctrine that asserted U.S. political character is different from Europe's. The United States, President Monroe declared, would consider the extension of Europe's monarchical political influence into the New World "as dangerous to our peace and safety." European powers should leave the Americas for the Americans, he warned, and he strongly implied that there existed a U.S. sphere of influence south of the border.
At the time, Europe shrugged. After all, the United States possessed neither a formidable army nor navy. But three serious problems fundamentally vitiated this apparently noble gesture to protect newly independent republics in South America from European re-colonization.
First, Washington proclaimed it unilaterally. Latin Americans didn't ask us for protection. U.S. diplomats didn't even consult their counterparts. That was ironic, since the Doctrine's "protection" involved placing the United States between Latin American countries and supposedly malevolent European states.
Second, its paternalism — the claim that "our southern brethren" lack the ability to defend themselves — raises hackles in Latin America. Even if the implication had some validity at one time, it no longer corresponds to the region's reality.
The third and most problematic issue Obama faces from the outmoded doctrine relates to its legacy. For more than a century, the United States has periodically intervened in the domestic affairs of Latin American countries. Typically the United States invoked the Monroe Doctrine — without threats from Europe — to justify self-serving intrusions that have inflicted heavy damage on Latin American dignity and sovereignty.
Roosevelt Corollary
Under President Theodore Roosevelt, the doctrine stood for the informal colonization of most "independent" Caribbean Basin countries. The so-called Roosevelt Corollary to the Monroe Doctrine claimed Washington's right to preemptively intervene and occupy a Latin American nation, even if no European power had yet threatened to impose its power there. Roosevelt asserted that by virtue of going into debt to a European bank, a Latin American country weakened itself sufficiently to be vulnerable to re-colonization. Ergo, anticipatory military intervention became a necessity from 1900 to 1933.
U.S. troops invaded Colombia in 1901 and 1902; Honduras in 1903, 1907, and 1911; and the Dominican Republic in 1903, 1904, 1914, and 1916, occupying the island nation until 1924. U.S. troops landed in Nicaragua on multiple occasions, occupying it for some 20 years, and occupied Cuba for three years (1906-1909) and Haiti for 20 years. U.S. forces also made incursions into Mexico, Panama, Guatemala, and Costa Rica.
President Dwight D. Eisenhower used the doctrine in 1954 to justify the overthrow of a democratically elected government in Guatemala. President John F. Kennedy embraced it from 1961 to 1963 in attacking Cuba, and President Lyndon B. Johnson raised its banner in 1965 when he sent 23,000 Marines into the Dominican Republic in support of generals who tyrannically governed the country over the next 13 years. President Ronald Reagan said it was the basis for the CIA wars he pursued in Nicaragua, El Salvador, and Guatemala during which more than 200,000 Central Americans died, as well as the U.S. attack on Grenada.
For these historic reasons, "Monroeism" carries a deeply negative meaning in Latin America and the Caribbean. Throughout the region, the mere mention of the Monroe Doctrine hints at impending U.S. aggression.
Nearly two decades after the Cold War's demise, U.S. policy elites still cling to this doctrine as an axiom of U.S. policy. In recent years they added as the latest corollary a demand that Latin American governments adopt neoliberal economics. No wonder Latin Americans have elected leaders — in Argentina, Brazil, Bolivia, Chile, Ecuador, Nicaragua, Paraguay, Guatemala, Honduras, Uruguay, and Venezuela — who repudiated not only the doctrine's implied hegemony, but the economic rules that accompany it today. Notably, not one Western hemispheric country supported the United States in October, when the UN General Assembly voted 185-3 to end the U.S. embargo against Cuba.
The Ballots Did It
Over the last decade, citizens in Venezuela, Brazil, Argentina, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, and other Central American nations have declared their opposition to U.S.-backed neoliberal economic policies and voted for candidates who eschew the notion of perpetual U.S. hegemony. Ballots, ultimately, killed the doctrine. This new wave of leaders is challenging U.S. supremacy. Last year, Bolivian President Evo Morales did what would have been unthinkable two decades ago: He evicted the U.S. Drug Enforcement Agency. Ecuador has kicked out a U.S. military base.
Most Latin American nations now defy the United States on some major policy. Chile and Mexico, both Security Council Members, voted against Washington when the key UN resolution arose that would have sanctioned Bush's invasion of Iraq. And U.S. influence has been further eroded by the stronger diplomatic, economic, and military ties with China, Russia, and Iran that several countries in the region are developing.
Given the facts, President Obama should announce as soon as possible — and no later than the mid-April Summit of the Americas in Trinidad that he's slated to attend — that the Monroe Doctrine is dead and buried. This move could serve as a rhetorical catalyst for developing real partnerships that acknowledge Latin America's new status. Only the funeral of this 19th-century canon will enable the United States to birth a healthy policy.
Philip Brenner is a professor of international relations at American University. His most recent book is A Contemporary Cuba Reader (Rowman and Littlefield, 2008).
Saul Landau is vice chair of the Institute for Policy Studies board of trustees. His most recent bbok is A BUSH AND BOTOX WORLD (CounterPunch / AK Press).
This essay was originally published by Foreign Policy in Focus.

lunes, 2 de febrero de 2009

50 años de revolución cubana. Los machetes al aire
A todos los compañeros que luchan por salvar a la Revolución, a todos los que intentan renovar el socialismo en Cuba.
Leonel González Díaz Hoy 1:44
www.kaosenlared.net/noticia/50-anos-revolucion-cubana-machetes-aire
…. Si ella me dejara de querer, cuando la contemplo al despertad, toda la pureza que me da, nunca la podré corresponder… Si ella se olvidara de cantar, ese hermoso mundo que me da, como volvería a predicar, si fue su palabra mi verdad,…. Pablo.
Desde el 10 de octubre de 1968 los machetes no han sido envainados, los desgraciados tiempos que corren, también lo impiden. Heroísmo y persistencia todavía son necesarios. No es algo que agrade, se trata sencillamente de cumplir con el deber.
Toca hablar del pueblo. Blancos, negros, mulatos, chinos, descendientes de franceses, y cientos de voluntarios internacionalistas, cinco generaciones soportan la revolución y cada una aporta su cuota de sacrificio. Los primeros 10 años de supervivencia siguen sin contarse en su imagen de heroísmo masivo y totalidad, los últimos 15 años de periodo especial corren igual suerte. Se habla de líderes y héroes pero no del héroe mayor, el pueblo. El pueblo, resiste en una epopeya que nadie ha sido capaz de describir. Obreros, campesinos, estudiantes, combatientes, médicos eminentes, artistas, intelectuales, religiosos, nuestras mujeres -las más heroicas de todos, con penalidades sin cuento y sosteniéndonos a todos- elaboran alimentos con nada, hacen zafras, enfrentan agresiones, ciclones y epidemia, masifican el internacionalismo, se montan en bicicletas, caminan, suben a atroces camellos, aprovechan las pocas horas de luz , trabajan y resisten, sonríen con los chistes de Pepito, la capa de Superman y el último…que apague el Morro, pero resisten, sosteniendo en alto el sueño de una sociedad sin explotadores ni opresores. Aunque algunos, desde sus oscuros rincones de burócratas, siguen aprovechándose de este héroe que lo ha dado todo.
Toca hablar de Fidel y la Generación del Centenario. Estoy seguro que no le agradan demasiado los elogios, los que deseamos ser marxistas y martianos no somos amigos del culto a la personalidad, ni depalabras grandilocuentes o solemnes sobre nadie.
Fidel y su generación liberaron y dignificaron la patria, Crearon todas las condiciones para que ninguno de nosotros continuara ignorante u olvidados. ¨Ël arriesgo la vida muy seriamente tratando de rescatarnos. Lo recuerdoen la tribuna en la Universidad,reaccionando indignadoante la mutilación hecha al testamento de JoséAntonio, recordaré siempre muy especialmente, cuando nos dijo Todo revolucionario debe pensar con cabeza propia.
Muchos han sentidosus equivocaciones como suyas, y la amargura, sentida por miles, cuando, por nobles o no tan nobles intenciones, se le ha desinformado o mentido. La lealtad obliga a decir: algunas veces no hemos coincidido, pero siempre hemos luchado, unidos, por los mismos ideales.
Su alerta a los revolucionarios, acerca de que nosotros mismos podíamos destruir el socialismo en nuestra patria y su llamado a que pensemos y discutamos como evitarlo, es una contribución imperecedera a la causa.
A 50 años de su obra mayor, Gracias Comandante por enseñarnos, como Céspedes y Martí, que el honor y los principios valen más que la vida y que los hombres y pueblos que nada temen, son tan poderosos como los que todos temen. Pase lo que Pase estaremos, junto a ti, en la fila de los necios.
Por siempre nos acompañaras en esa misión de repartir panes y peces, en esa carga para expulsar los mercaderes del templo, para –como deseaba Rubén-“matar bribones, para acabar la obra de las revoluciones…para que nuestros hijos no mendiguen de hinojos, lo que sus padres le conquistaron de pie.” La Continuidad y Perfección de nuestra revolución en el siglo XXI, un nuevo socialismo, será siempre –estoy seguro-la carga que tú querrías.
Toca hablar de mi generación. No reclamaron ni reclaman nada. Solo un puesto de combate y lealtad absoluta al pueblo. No tenían edad para hacer la insurrección, pero la revolución es tan suya como de cualquiera. El último combate de los hijos de la generación del centenario y la generación Guevarista essalvarla revolución y el socialismo, darle de nuevo aliento y pelear hasta dar el último adiós por la más amplia libertad, igualdad y realización de la más amplia bondad humana. Es un deber con las generaciones venideras-que lo harán y tienen todo el derecho, a hacerlo a su manera-pero también es un deber con todos los combatientes por la emancipación del ser humano, en primer lugar con los que cayeron o los que llenos de puras intenciones incluso, equivocaron el camino, es una manera de rescatarlos.
Nuestros nietos leerán los relatos de estos tiempos como leerán la Ilíada y la Odisea, y admiraran lo logrado por el pueblo y sus héroes. Si somos leales y consecuentes y capaces de contarles también de nuestras equivocaciones e insensibilidades, entonces se sentirán orgullosos.
El mérito de nuestra resistencia ciclópea solo será evaluado en toda su dimensión por la historia. El heroísmo y la masividad de nuestro internacionalismo también; pero Cuba, que durante 50 años han intentado doblegar mediante invasiones, amenazas termonucleares,terrorismo, el bloqueo genocida más largo de la historia, y las permanentes campañas de difamación contra ella, tiene que continuar derrotando al enemigo sin frenar su avance ni su creatividad revolucionaria.
El socialismo en Cuba se hizo contra dogmas y poderosos y se tiene que continuar haciendo contra dogmas y poderosos. Incluso contra los que desde sus muy oscuros rincones, convertidos en funcionarios que una vez fueron revolucionarios, dogmatizan, anatemizan y se niegan a continuar avanzando.
El mundo ha cambiado, La revolución ha madurado, las generaciones pasan, los ideales quedan. El tejido de seguridad filosófica, ideológica, política, jurídica y de defensa nacional, que permitió a los revolucionarios neutralizar a la reacción y al poderoso adversario exterior en las condiciones del pasado siglo, hace tiempo que también está neutralizando,desacreditando y entorpeciendo a los revolucionarios, al ideal y las posibilidades de avance del socialismo en Cuba. Debe revisarse y renovarse radicalmente.
El Socialismo siempre conmovió por su aspiración a superar el ideal ilustrado y romántico de los revolucionarios del 89, ampliando el contenido de la libertad, la igualdad y la fraternidad. Se trataba de democratizar y socializar la vida más allá de la forma o la limitación que impone una sociedad de clase, aspiración que no puede estar inscripta en el proyecto capitalista, excluyente, elitista y explotador.
Creemos posible, sí, la creación de unacivilización basada en el amor, en la solidaridad más autentica, en la libertad más plena. Deseamos cambiar la tristeza de todo corazón marginado del mundo, deseamos continuar haciendo eso en Cuba a pesar de la cercanía del enemigo o las garras del subdesarrollo.
Nadie auguró un camino sin dificultades, nadie puede exigir infalibilidad, nadie está de acuerdo con metas ingenuas o imposibles, pero cuando se compromete ante el pueblo la palabra hay que cumplirlas, cuando el pueblo habla, no debe haber voz más alta, la credibilidad no tiene sustituto en esta hora de la patria
Todos tenemos que hacer la canción que se había perdido, todos tenemos que formar parte de los rescatadores de sueños, entre todos podemos construir el socialismo que necesitamos en este nuevo siglo.
A laspartes esenciales de nuestro marxismo, el ideal progresistas de Los luchadores contra España, el ideal revolucionario de los primeros marxistas y el ideal de la generación radical del centenario, debemos seguir incorporando todo lo nuevo quela vida nos ha enseñando y que las nuevas generaciones han aportado y aporten..
La emancipación de los trabajadores implica una transformacióntotal.Lo que se requiere, es superar el núcleo durodel viejo orden, -estado, capital, trabajo asalariado- enfrentar la explotación, la dominación y la enajenación a la vez, llevar adelante la revolución en el terreno decisivo de las relaciones y condiciones concretas de producción y consumo, así comoen su dimensión social y política.
Debemos privilegiar la ética y la cultura. Debe ser intransigente respecto a todo tipo de discriminación y atentado a la dignidad de las personas. También debeser cuidadoso con la naturaleza.
Los cambios que necesita nuestro modelo, y que tendrán lugar, deben ser hacia más socialismo perfectible y renovado. Y más socialismo solo puede significar más participación y decisión económica, social y política de los trabajadores y revolucionarios, más respeto a la individualidad y la dignidad del hombre. Y mucho más coraje para cambiar todo lo que debe ser cambiado
El año 2009 será decisivo parael destino del socialismo en Cuba, aprestémonos a luchar por nuestros ideales y sobreponernos a insuficiencias y errores, volvamos a dar alas a la Revolución. La nueva generación no tiene que añorar la historia pasada, frente a ella esta una nueva, mucho más importante. Hagamos realidad los sueños del pueblo y con ellos losnuestros. Llenemos de pleno humanismo y libertad nuestro socialismo.
Que nadie desfallezca, que nadie abandone.
Un minuto de silencio ante todos los caídos, el reconocimiento a la hazaña de los fundadores, el agradecimiento eterno a todo ser humano que solidariamente nos ha acompañado en estos años y la reafirmación que no traicionaremos, ni nos cansaremos. Nada ni nadie será olvidado, nada ha sido en vano.
Cantemos todos, orgullosos de lo realizado e inconformes por lo logrado, desde lo más profundo de nuestros corazones, No la perderé.
Ni la mayor riqueza arrancarauna concesión a este clamor repartido. Y se encontraran los del machete aguerrido con el último héroe que hasta hoy se ha perdido, todos gritaran, será mejor hundirnos en el mar, que antes traicionar la gloria que se ha vivido.
Vivan eternamente Los 50 años de larevolución Cubana y sus héroes y mártires.
Viva el Socialismo que necesita nuestro pueblo.
Viva Cuba libre.
*Con permiso y agradecimientoeterno a Pablo.