martes, 7 de septiembre de 2010

Aviones piratas contra Cuba para entender la injusticia contra Gerardo Hernández Nordelo

Wilkie Delgado Correa

“La verdad debiera ser nuestra compañía más íntima y duradera” En el artículo anterior titulado “HISTORIA SOBRE AVIONES PIRATAS MADE IN USA Y LA CONDENA INJUSTA DE GERARDO HERNÁNDEZ”, expusimos sólo parte de la historia, o sea, lo relacionado con la captura, derribo, o incursiones significativas de aviones piratas.
Como se trata de un largo recuento, en este artículo pongo énfasis en las misiones cumplidas por las incursiones piratas para causar destrucción de los recursos materiales en Cuba y provocar el espanto y la muerte en la población cubana.
El mundo debe saber que el incidente del derribo de dos avionetas de la organización terrorista Hermanos al Rescate, el 24 de febrero de 1996, con la muerte de 4 personas, no fue un hecho aislado, desmedido o sin justificación, pues los reiterados incidentes provocados por esa organización databan desde 1994. Con paciencia extrema y la toma de medidas de seguridad, de denuncias públicas de los hechos reiterados de violaciones de la soberanía nacional, de comunicaciones de protestas al gobierno de los Estados Unidos y denuncias ante la Organización Internacional de Aeronáutica Civil, Cuba soportó durante cerca de 3 años lo que ningún otro Estado hubiera permitido.
Como ha señalado Leonard Weinglass, abogado de la defensa de los Cinco Héroes, si los hechos de violaciones y desafíos reiterados hubieran ocurrido en territorio norteamericano, si los vuelos hubieran incursionado en Washington, la capital de Estados Unidos, si los llamados de las avionetas a través de propaganda y objetos hubiera estado dirigida al cambio del sistema político norteamericano a fin de instaurar el socialismo, si dichas avionetas hubieran procedido de Cuba o cualquier otro país de la región, ¿se habría tolerado durante cerca de tres años estos actos ilegales y no permisibles por el Gobierno estadounidense, con la misma paciencia y sentido de la responsabilidad con que lo hizo Cuba? ¿Esta acción proveniente de un país extranjero se habría quedado en un simple acto soberano del derribo de las aeronaves? ¿No se habrían desarrollado represalias de fuerza bélica contra el país que tolerara, a sabiendas, tales actos de agresión?
Lo grave e inmoral de este asunto, es que el país agredido desde territorio norteamericano por una organización terrorista que proclamaba sus fines subversivos en los medios de comunicación masiva; el país que denunció tales hechos ante la opinión pública internacional, las autoridades gubernamentales de los Estados Unidos y la Organización Internacional de la Aeronáutica Civil; el país que alertó sobre la ilegalidad, irresponsabilidad y peligrosidad de estos hechos; el país que advirtió a tiempo a los Estados Unidos y al mundo que no se continuarían tolerando tales actos y se pondría fin a las violaciones de la soberanía nacional, cuando lo hizo soberanamente, tuvo que soportar las calumnias y la más miserable campaña mediática, así como la impúdica justificación para arreciar el bloqueo con la firma de la Ley Helms-Burton, tras el derribo de las avionetas piratas.
Lo más cruel e injusto es que el espíritu de venganza y la falta de ética y consecuencia del gobierno de Clinton, conllevó a la prisión de los cinco cubanos Héroes, en setiembre de 1998, sólo tres meses después que se produjeran en La Habana, junio de 1998, conversaciones entre oficiales del FBI y las autoridades correspondientes cubanas, por encargo del presidente Clinton, a fin de conocer los detalles específicos del mensaje que Fidel transmitiera a través del Premio Nobel Gabriel García Márquez sobre actos terroristas diversos que se planificaban desde territorio norteamericano, que afectarían a Cuba y a otros países de la región.
Pero lo más injusto y repulsivo fue inculpar y condenar a Gerardo Hernández Nordelo, por una supuesta conspiración para cometer asesinato, en relación con el derribo de las 2 avionetas y la consiguiente muerte de 4 personas, en una causa incoada 2 años después de este hecho. Pero ahí no quedó todo, los familiares de las personas muertas, recibieron millones de dólares, como indemnización por tales hechos, utilizando fondos congelados a Cuba en los Estados Unidos. Y el propio jefe mafioso José Basulto, ciudadano norteamericano de origen cubano, artífice y protagonista principal de las agresiones terroristas de carácter continuado, recibió también el premio millonario a expensas de fondos cubanos depositados y congelados en bancos norteamericanos, afirman que por compensación del estrés post-traumático ocasionado por estos hechos.
La impudicia si tiene nombres, lugar y fecha de nacimiento. Así que se produjo un despojo financiero a Cuba, la nación agredida; se le satanizó y se produjo un incremento del bloqueo contra Cuba; se cometió el sacrificio, como venganza, sobre una persona inocente, Gerardo Hernández Nordelo, al vincularlo con el derribo de las avionetas, y, por supuesto, también sobre el resto de los cuatro cubanos: Antonio Guerrero, Ramón Labañino, René González y Fernando González. Ellos infiltraron a las organizaciones terroristas en Miami para alertar de sus planes agresivos, evitar las posibles muertes de ciudadanos cubanos o visitantes extranjeros de cualquier parte del mundo, incluyendo a norteamericanos, y a fin de que las autoridades cubanas pudieran informar al Gobierno de Estados Unidos, país desde donde se fraguaban tales acciones terroristas, a otros gobiernos de la región y a organizaciones internacionales, así como a la opinión pública nacional e internacional, de la peligrosidad que tales planes y actos criminales implicaban. ¿Acaso no eran estos objetivos y misiones, legítimos a la luz de las circunstancias y realidad de los hechos ocurridos hasta entonces, y de la actitud consecuente con que el Gobierno cubano había manejado estos asuntos con gobiernos como el de los Estados Unidos y los de los países de la región centroamericana y del Caribe, entre otros?
Pero para que se entienda mejor estos hechos más recientes, continuaremos exponiendo los antecedentes con que contaba Cuba y las experiencias vividas por la población cubana, a la cual se le impuso el terror, proveniente del territorio norteamericano, prácticamente desde los inicios del triunfo de la Revolución. Añádanse a lo ya conocido y relatado en el artículo anterior, este rosario de hechos terroristas protagonizados por los tripulantes de aviones piratas.

El 11 de octubre de 1959, un avión arrojó dos bombas incendiarias sobre el Central Niágara, en Pinar del Río.
El 19 de Octubre de 1959, un avión dejó caer dos bombas en el Central Punta Alegre, Camagüey, el 21 del mismo mes, un avión procedente de los Estados Unidos, bombardeó La Habana, con un saldo de 2 muertos y 42 heridos. Simultáneamente desde una avioneta se arrojó propaganda contrarrevolucionaria. Ese mismo día 21, una avioneta bombardeó el Central Violeta, en Camagüey.
El 22 de Octubre, un avión ametralló un tren de pasajeros en la provincia de las Villas; el 23, una avioneta dejó caer en Manicaragua, Las Villas, alijos de armas.
El 4 de noviembre de 1959, tres aviones piratas lanzaron bombas en distintos puntos de la provincia de Oriente.
El 12 de enero de 1960, una avioneta quemó 500 000 arrobas de caña en la provincia de La Habana; el 21, un avión arrojó cuatro bombas sobre la zona urbana de Cojímar y Regla, en La Habana; el día 28, un avión lanzó bombas incendiarias sobre 8 centrales en las provincias de Camagüey y Oriente.
El 7 de febrero de 1960 una avioneta incendió 1 500 000 arrobas de caña en cuatro centrales, en Camagüey; el 23, varias avionetas regaron cápsulas incendiarias en dos centrales de las Villas y uno en Matanzas. El 8 de marzo, una avioneta lanzó materiales inflamables en la zona de San Cristóbal, Pinar del Río, y fueron quemadas más de 250 000 arrobas de caña.
El 4 de abril, un avión procedente de la Base Naval de Guantánamo, arrojó material cerca de la Playa de Buey Cabón, en Oriente.
El 29 de setiembre, un avión cuatrimotor dejó caer gran cantidad de armas sobre las lomas del Escambray, zona en que se encontraban operando bandas de contrarrevolucionarios alzados, que respondían a las instigaciones y orientaciones de Estados Unidos.
El 8 de octubre, un avión norteamericano lanzó armas e implementos bélicos en la zona del Escambray, Las Villas, que fueron capturados.
El 7 de enero de 1961, aviones procedentes de Estados Unidos, lanzaron en el Escambray gran cantidad de armas norteamericanas, que fueron ocupadas.
El 30 de enero, un avión bimotor dejó caer propaganda contrarrevolucionaria en Sancti-Spiritus, Las Villas.
El 24 de febrero, una avioneta lanzó fósforo vivo e incendió cañaverales en la zona de Santa Ana, Camagüey.
El 3 de marzo, un avión B-26 voló sobre la provincia de Pinar del Río y dejó caer propaganda subversiva; el día 6, un avión dejó caer armas en Cabañas, Pinar del Río, e incendió la fábrica de conservas La Campesina, en Colón, Matanzas; el 22, un avión dejó caer propaganda subversiva en Santo Domingo, Las Villas; el 24, otro avión realizó la misma acción en Sagua la Grande.
El 15 de abril de 1961, previo a la invasión mercenaria por Playa Girón o por Bahía de Cochinos, aviones B-26 de fabricación norteamericana, procedentes de Guatemala, bombardearon los aeropuertos de Ciudad Libertad y San Antonio de los Baños, en la provincia de La Habana, y de Santiago de Cuba, en la provincia de Oriente. La agresión fue repelida, sin el derribo de aeronaves, pero, sin embargo, con un saldo trágico de muertos y heridos.

Este hecho fue denunciado por el embajador de Cuba en la ONU, Raúl Roa, mientras que el representante de Estados Unidos, Adlai Stevenson, achacó tales hechos a pilotos cubanos sublevados, mostrando las fotos de un avión con la insignia cubana. De esta manera vil se unieron la mentira, el crimen y la falsificación de las identidades de los aviones atacantes por el Gobierno norteamericano en su pretensión de ocultar a la comunidad internacional su participación en la invasión que ocurriría 2 días después, el 17 de abril de 1961, apoyada por una cuadrilla de aviones que provocaron numerosos muertos y heridos entre los militares, milicianos y civiles cubanos. Sólo meses después, el presidente Kennedy hubo de reconocer la paternidad de Estados Unidos de aquella invasión mercenaria.

El 3 de enero de 1962, Cuba protestó ante el Gobierno de Estados Unidos por nuevas violaciones al espacio aéreo del territorio nacional, que sumaban 119, de las cuales 76 fueron realizadas por aeronaves procedentes de la Base Naval de Guantánamo.
El día 7, una avioneta lanzó armas sobre zonas de Pinar del Río y las Villas, que fueron capturadas.
El 19 de noviembre, un avión norteamericano bombardeó el barco mercante Damují.
El 28 de mayo de 1963, un turbohélice anfibio de la Marina de Guerra norteamericana, disparó una ráfaga de ametralladora de grueso calibre sobre Cayo Francés, poniendo en peligro las vidas de obreros cubanos y soviéticos que trabajaban en la búsqueda de petróleo.
El 5 de setiembre, aviones procedentes de Estados Unidos penetraron en territorio de las Villas y fueron repelidos, dejando caer explosivos, que ocasionaron un muerto y varios heridos; el día 9, un avión pirata dejó caer cinco bombas en el Central Brasil, dañando varias viviendas.
El 17 de enero de 1965, un avión B.-26 lanzó una bomba a 13 kilómetros del Central Niágara, en Pinar del Río.
El 15 de junio de 1966, violaron el espacio aéreo tres aviones militares de Estados Unidos.
El 29 de setiembre, una avioneta lanzó tres bombas contra una termoeléctrica en construcción y otras instalaciones en Nuevitas, Camagüey.
El 23 de noviembre, un avión norteamericano lanzó tres bombas sobre la planta Raúl Cepero Bonilla, antigua Cubanitro, en Matanzas.

Así ha sido el rosario de agresiones y violaciones del espacio aéreo de Cuba, entre las cuales debe recalcarse las múltiples efectuadas por los aviones espías SR-71.
En fin, que Estados Unidos ha utilizado aviones de sus Fuerzas Armadas para la violación del espacio aéreo cubano y actividades de espionaje sobre el territorio nacional. Además, ha permitido que aviones piratas procedentes de su territorio o de la Base Naval de Guantánamo, efectuaran actividades violatorias y agresivas contra Cuba que han acarreado pérdidas materiales de millones de pesos, así como pérdidas de vidas humanas. Si se tiene en cuenta la antigua división político-administrativa del país entonces, consistente en seis provincias, se podrá constatar que a todo lo largo del país, de Oriente hasta Occidente, se produjeron acciones terroristas por aviones piratas procedentes de Estados Unidos. ¿Qué otro país del mundo ha estado sometido a este asedio terrorista a través de aviones piratas por tan largo período histórico y de una magnitud tan espeluznante procedente de un país vecino? Con los hechos y acontecimientos narrados y los argumentos lógicos y justos que se corresponden a la luz de la verdad histórica, ¿se podrá entender mejor las razones que obligaron la presencia de los cinco Héroes cubanos en los Estados Unidos, en una coyuntura histórica en que la estrategia mayor de los grupos contrarrevolucionarios de Miami era evitar todo acuerdo de mejoría de las relaciones entre EE.UU y Cuba, y provocar un incidente cualquiera que se tomara como pretexto para una agresión armada directa de los Estados Unidos, que condujera a una guerra entre los dos países de consecuencias previsibles o imprevisibles para ambas partes?


Carta a Obama

Presidente Barack Obama White House 1600 Pennsylvania Avenue NW Washington, DC 20500
Estimado Presidente Obama:
Re: Cinco Cubanos presos en cárceles de Estados Unidos
Somos dirigentes sindicales de Canadá y Gran Bretaña y representamos colectivamente a más de tres millones de hombres y mujeres. Nos hemos unido con trabajadores, organizaciones comunitarias y de justicia social e individuos en general para aunar nuestras voces a los que buscan la justicia en todo el mundo clamando la inmediata liberación de cinco hombres que actualmente se encuentran en prisiones federales de Estados Unidos– René González, Antonio Guerrero, Ramón Labañino, Fernando González y Gerardo Hernández. Estos cinco hombres fueron arrestados en Miami, Florida en septiembre de 1998 y acusados de 26 cargos de violación de las leyes federales de Estados Unidos. Veinticuatro de esos cargos fueron delitos relativamente menores y técnicos. Ninguno de los cargos incluía violencia en estados Unidos, ni el uso de armas, ni daño a la propiedad. La misión de estos hombres, al contrario de lo que se les acusó, no era obtener secretos militares, sino monitorear e informar acerca de los ataques terroristas que se planificaban contra el pueblo de Cuba. Además de sufrir un injusto encarcelamiento, a dos de los Cinco, Gerardo Hernández y René González, se les han negado sus derechos humanos básicos. A ellos no se les ha permitido recibir visitas de sus esposas. Adriana Pérez no ha visto a su esposo en 12 años y Olga Salanueva no ha visto al suyo en 9 años. Gerardo está sufriendo problemas de salud, incluyendo presión alta. En Abril solicitó una consulta médica, pero no fue visto por un doctor hasta el 20 de julio, tres meses después. Actualmente hay un problema con una bacteria en la prisión donde él se encuentra, con algunos casos serios de salud. El doctor le había prescrito un análisis de sangre a Gerardo, pero en su lugar él fue abruptamente llevado al “hueco” y mantenido allí durante 13 días, hasta el 3 de agosto. Esta hostilidad contra Gerardo tiene lugar en un momento crítico. El está preparando su Habeas Corpus. Es alarmante observar que a pesar de ser un preso modelo, esta es la tercera vez que Gerardo es llevado al “hueco” mientras prepara una apelación. El arresto, el juicio y el tratamiento a estos cinco hombres inocentes, por su valiente intento de detener el terrorismo, es no solo injusto, sino que expone la hipocresía de la demanda de Estados Unidos a oponerse al terrorismo. Todos nosotros reunidos en Toronto, Ontario, Canadá el 8 de agosto de 2010 le solicitamos que Ud. tome medidas para garantizar que: -Gerardo Hernández reciba atención médica urgente y pueda preparar adecuadamente sus apelaciones legales sin hostigamiento; -a Gerardo Hernandez y René González se les autorice las visitas de sus esposas Adriana Perez y Olga Salanueva; y -que los casos de los cinco sean revisados con vistas a su liberación. Sinceramente, Tony Woodley Secretario General Conjunto, UNITE Ken Neumann Director Nacional para Canada, USW Wayne Hanley Presidente Nacional, UFCW-Canada cc: David Cameron, Primer Ministro de Gran Bretaña Stephen Harper, Primer Ministro de Canada Hilary Clinton, Secretaria de Estado, Departamento de Estado Estados Unidos Eric Holder, Fiscal Genral, Departamento de Justicia de Estados Unidos Leo Gerard, Presidente Internacional, USW

No hay comentarios: